La ciencia

2009: Todos sabemos que la medición del impacto humano está cargada de posibles problemas técnicos y de salud. Dicho esto, la fuerza (N) en sí misma es subjetiva: cuanto más dura es la superficie, más fuerza se genera, hasta golpear un objeto sólido. ¡Piense en la generación de fuerza como desaceleración! Cada equipo de medición personalizado jamás construido para medir la fuerza de un ataque de combate habrá variado en dureza, produciendo resultados muy diferentes, que son incomparables. Por lo general, eran sacos de boxeo de entre 100 y 200 libras, suspendidos de una amplia variedad de formas. Estas mediciones no contribuyeron a nuestra comprensión de los strikes ni ayudaron con el entrenamiento.

La investigación y el desarrollo

Nuestras investigaciones durante muchos años indicaron que los deportes de combate y los científicos del deporte necesitaban un nuevo enfoque. Nos propusimos desarrollar una plataforma de impacto táctil. Un diseño que luego nos permitiría, añadir sensores. Una plataforma de medición donde, independientemente del estilo/peso/género/edad/profesional o amateur, los usuarios pueden estar seguros de golpear repetidamente, hasta su máxima capacidad.

Ahora era posible una investigación más profunda ya que habíamos perfeccionado la mejor superficie de ataque para medir todas las técnicas de combate. Nuestra plataforma de impacto, el PowerKube®, era un pequeño dispositivo portátil, de forma simétrica pero, lo más importante, capaz de controlar la compresión, hasta 12 cm (5 pulgadas) en el momento del impacto. Cuanto más fuerte es el golpe, más profunda es la compresión y por tanto más resistencia experimenta el usuario, actuando como un freno, controlando la desaceleración. A esto lo llamamos CCT® (Tecnología de Compresión Controlada).

Luego estábamos equipados para comenzar a investigar otros valores mensurables, como la potencia de impacto en vatios (W) y la energía cinética en julios (J), de un ataque de combate.

Los transductores de ultra alta velocidad nos permitieron dividir los datos generados por un golpe en millonésimas de segundo, en tiempo real, dentro del PowerKube®. Luego recopilamos datos sorprendentes a nivel mundial en múltiples estilos para realizar un análisis detallado. Sin embargo, dedujimos rápidamente que ni la potencia (de impacto) ni las mediciones de energía (cinética) individualmente reflejaban con precisión la amplia variedad de tipos de impacto en todos los estilos de combate.

En cada golpe de combate existe el impacto inicial relacionado con la velocidad, que es un pico de energía de corta duración (como un choque) que dura sólo unas pocas millonésimas de segundo, junto al cual está la energía cinética rodante. Un estudio científico independiente de un prototipo de preproducción realizado por el Instituto Australiano del Deporte, concluyó que nuestra medida de potencia coincide en un 98,2% con la fuerza (N). Sin embargo, mucho después de que se ha capturado el poder/fuerza, la energía cinética continúa. Es la energía cinética la que le da a una técnica su característica de penetración. A diferencia de los objetos inanimados, los atletas mueven su centro de gravedad durante el impacto para aprovechar su energía cinética. Esto explica de alguna manera las capacidades de ruptura sobrehumanas en algunas artes marciales.

Basándonos en esta masa de datos y trabajando junto con atletas profesionales, construimos nuestro algoritmo para generar una unidad compuesta de medida de potencia y energía. A esto lo llamamos franklin, en honor al inventor Kevin Franklin, una cuantificación de la Fuerza Humana (f)® .

Ahora tenemos el PowerKube® 3.3 de próxima generación , que cuenta con modelado matemático avanzado e incluso puede detectar movimientos humanos hacia adelante o hacia atrás cuando está portátil, para negar lecturas falsas.